DIE FRÖSCHELEIN
Nuestro grupo Die Fröschelein está formado por 15 niños de 2 años atendidos por dos educadores.

Nuestros principales objetivos son:
El grupo está situado en la planta baja del kindergarten con acceso directo al jardín y ofrece a los niños un entorno agradable y manejable para prepararlos con cuidado para la rutina diaria.
Comenzamos el día con la asamblea, que es un ritual de bienvenida fijo en la rutina diaria. Aquí los niños experimentan ser parte del grupo y a través de canciones y actividades aprenden a concentrarse por un período más largo de tiempo.
Los niños sienten que deben estar juntos y experimentan seguridad a través de la repetición diaria.
Después viene el desayuno común, que se toma en pequeños grupos. El entorno claramente dispuesto ayuda a los niños a concentrarse en su comida y a tener conversaciones en la mesa. Se promueven las habilidades sociales y de lenguaje, pero también se estimula la independencia.
Tenemos una rutina diaria estructurada, que ayuda a nuestros niños a construir su seguridad y confianza.
Iniciamos nuestro día recibiendo a los niiños, intentando que la separaración de sus padres se haga con cariño y empatía.
Por la mañana ofrecemos actividades específicas como manualidades, juegos de mesa, rompecabezas, pintura o juegos en la zona de construcción.
Después de recoger los juguetes, hacemos nuestra primera asamblea. Aquí los niños aprenden a conocer y usar el idioma alemán a través de juegos, canciones, leyendo libros ilustrados y juegos de movimiento.
A esto le sigue nuestro desayuno conjunto, en el que todos los niños disfrutan de lo traído de casa en un ambiente familiar y acogedor.
Después del desayuno pasamos al juego libre, ofreciendo también varias actividades guiadas. En el juego libre se producen procesos de aprendizaje autodirigidos, que retomamos y profundizamos a través de actividades guiadas.
Dado que el enfoque pedagógico se centra en la introducción lúdica al idioma alemán, ofrecemos situaciones cotidianas que están acompañadas lingüísticamente a través de juegos específicos para promover el desarrollo del lenguaje con el fin de apoyar a los niños en la adquisición del mismo de la mejor manera posible.
Antes de ir al jardín o a comer, nos reunimos en nuestra segunda asamblea y terminamos la mañana cantando y leyendo un cuento. Este ritual de despedida es importante para facilitar la transición del kindergarten a la casa o al resto del día.